Destacar lo que hace especial al texto seleccionado.
• Si los chicos recuerdan algún fragmento en particular que hayan disfrutado (suelen hacerlo), poder volver a leerlo para todos. Incluso, poder volver a leer con una entonación Escuela Primaria N° 17-Marcelo Berbel- Página 5 o tono diferente, o acercar el texto a los niños que sepan y quieran leer el fragmento ellos mismos.
Al leer, es importante que destaques aquella singularidad del texto,
• Si en cambio se trata de un cuento de miedo o terror, bajá el tono de voz, como si hablaras en secreto, para dar un clima de tensión y expectativa.
Todas esas sugerencias creativas pueden obtenerse combinando materiales descartables como revistas viejas, recortes de tela, cartón, botones e hilos, mezclas para hacer máscaras.
Presentación del libro que se va a leer.
Entrevistar a diferentes personas de la comunidad que nos narren la literatura oral, que forma parte del folckore de la sociedad de Taquimilán, es decir rescatar de esta forma la Memoria de la comunidad a través de los Actores de la cultura oral local.
• En el caso del humor, fijarse en una lectura previa cuáles son los fragmentos que causan gracia. Leerlos con un tono de voz más elevado generando contraste.
Permití que todos los niños puedan ver bien la tapa, invitarlos a leer entre todos el título, a conversar sobre su significado y motivarlos para que ellos mismos puedan anticipar de qué tratará la historia.
Diferenciar con tonos más serios aquellos fragmentos realistas y alzar el tono cuando aparezca algo sorprendente, demostrar el asombro en la voz.
Es fundamental crear un espacio adecuado, la instalación de una biblioteca aúlica, colocación de una alfombra y confección de almohadones,
Toda producción creativa posterior que intente retratar la experiencia de la lectura resultará una interesante propuesta de cierre. Algunas sugerencias son: crear un collage, un títere, una máscara o una maqueta.
Luego de la lectura, permitir que los niños intercambien sus sensaciones acerca de la historia; preguntarles qué sintieron –si miedo o si quisieron reír o quedaron sorprendidos– y en qué parte.
Para cerrar la charla, invitarlos a pensar en el título del cuento, ¿Por qué se llama así? Permití que relacionen el título con la trama y garantizar que todos los niños puedan decir su interpretación y que se escuchen entre sí.
