Relacionar Columnas Mecanismos de adaptación Versión en línea Relaciona la columna izquierda de las asimilaciones con su respectiva acomodación de la columna derecha. por Fernanda Vazquez 1 Un niño juega con pelotas de goma, hasta que recibe una de trapo. Las formas semejantes de la pelota le permitirán reconocerla como tal, a pesar de descubrir luego sus diferencias. 2 Un joven de once años tiene una idea de familia estructurada (padre y madre), que se ve en jaque ante el divorcio de sus padres, lo cual somete a la idea a una crisis, pues no encaja en sus conceptos previos. 3 Cuando empezamos a aprender un idioma nuevo, usamos de referencia el que ya manejamos para “traducir” todo a esquemas mentales ya concebidos. 4 Un infante recibe por primera vez un biberón y de inmediato intenta chuparlo, pues la experiencia con el pezón materno le ha preparado para relacionarse con el objeto (con casi todo, en realidad) de esa manera. 5 Un niño ve por primera vez a una cebra, y lo nombra erróneamente como caballo, un animal más familiar a su orden de experiencias. El joven, con el tiempo, aprenderá a acomodar ideas más complejas de familia que le permitirán mantener el vínculo con sus padres a pesar de que no estén juntos en ese momento. El niño intenta botar la pelota y se da cuenta de que no reacciona del mismo modo que las de goma. Su concepto de pelota se amplía para acomodar la nueva distinción entre objetos similares. Al niño se le aclara que se trata de otro animal, y el pequeño aprende a distinguirlo de los caballos, incorporando un nuevo aprendizaje. Cuando hemos aprendido un idioma nuevo , sus estructuras mentales son de común manejo y no necesitamos “traducir” el pensamiento a un idioma anterior, sino que podemos elaborar el pensamiento directamente en el nuevo. El infante aprende, eventualmente, a sostenerlo para poder chuparlo, cosa que no debía hacer con el seno materno, incorporando una diferencia a los objetos similares.