1
Parte constitutiva del Aparato Psíquico formado por todo contenido mental al que el sujeto únicamente puede acceder con dificultad por estar reprimido.
2
Mecanismo o proceso psíquico del cual se sirve un sujeto para rechazar representaciones, ideas, pensamientos, recuerdos o deseos y mantenerlos en el inconsciente.
3
Es la pulsión de muerte, que se opone a Eros, la pulsión de vida.
4
Representa los pensamientos morales y éticos recibidos de la cultura. Consta de dos subsistemas: la "conciencia moral" y el ideal del yo. La "conciencia moral" se refiere a la capacidad para la autoevaluación, la crítica y el reproche.
5
Energía psíquica característica de los sujetos de la especie humana que tiene su fuente en una excitación interna (un estado de tensión percibida como corporal) y que se dirige a un único fin preciso: suprimir o calmar ese estado de tensión. Para lograr este fin, dicha energía se sirve de un objeto que no está predeterminado.
6
Tipo de energía de la pulsión. Afecto ligado a la transformación energética de las pulsiones, cuya meta original sería siempre sexual.
7
es la instancia más antigua y original de la personalidad y la base de las otras dos. Comprende todo lo que se hereda o está presente al nacer, se presenta de forma pura en nuestro inconsciente. Representa nuestros impulsos o pulsiones más primitivos. Constituye, según Freud, el motor del pensamiento y el comportamiento humano. Opera de acuerdo con el principio del placer y desconoce las demandas de la realidad.
8
Mayor proximidad con la realidad y surge a fin de cumplir los deseos teniendo en consideración las normas sociales en las que vivimos y las internas. Tiene que conservar su propia autonomía por el mantenimiento de su organización integrada.