Relacionar Columnas TEA: AAF y SAVersión en línea Al comparar las características del Síndrome de Asperger y del Autismo de Alto Funcionamiento, se observa que, entre ambos cuadros diagnósticos hay determinados aspectos comunes, así como ciertas discrepancias. Se encontraran en la primera columna las características del AAF y en la segunda del SA. por Leidy Osorio 1 Los manierismos motores son frecuentes. 2 Falta de conciencia acerca de las emociones expresadas por los demás. 3 El retraso considerable en el juego simbólico e imaginativo es común. 4 Interés excesivo por actividades manipulativas y visoespaciales. 5 Ecolalia, intercambio erróneo de pronombres y lenguaje repetitivo son frecuentes. 6 Ausencia de deseo e interés por desarrollar relaciones sociales. 7 Desarrollo adecuado de las habilidades cognitivas no verbales. 8 En la conversación, ausencia de referencias con respecto a la información proporcionada por el interlocutor. 9 Actuación avanzada en áreas no verbales de razonamiento, capacidades espaciales, formación de conceptos no verbales y memoria visual. 10 Agilidad motora. 11 Dificultades en el desarrollo del lenguaje, manifestadas en la etapa temprana de los tres primeros años de vida. 12 Habilidades del lenguaje expresivo poco desarrolladas. 13 Ausencia de placer en la interacción social temprana con las figuras de crianza. 14 Retraso común en el desarrollo temprano de las habilidades de autonomía. 15 Interés en las actividades físicas. 16 Dificultad para ser consciente de sus propias dificultades sociales. Interés en acumular datos informativos acerca de temas específicos. En la conversación, referencias inusuales y ambiguas con respecto a la información proporcionada por el interlocutor Desarrollo adecuado de las habilidades cognitivas (verbales y no verbales). Actuación adecuada o avanzada en las áreas de Razonamiento verbal, comprensión verbal, vocabulario y memoria auditiva. Vocabulario sofisticado e idiosincrásico. Intelectualización de las emociones e intencionalidad de los demás. Capacidad más avanzada para ser consciente de sus dificultades sociales y diferencias. Desarrollo adecuado de los componentes formales del lenguaje durante la etapa de la infancia temprana. Las conductas de iniciación de la interacción social son frecuentes pero idiosincrásicas o inapropiadas. Existencia de un deseo por desarrollar y establecer relaciones sociales. Resistencia a participar en los juegos que implican actividad física. Gran facilidad para expresar ideas verbalmente. Torpeza en la ejecución de movimientos y dificultades con la coordinación motora. Los manierismos motores y movimientos estereotipados son poco frecuentes. Adquisición adecuada de las habilidades de autosuficiencia. Desarrollo adecuado de la capacidad de juego imaginativo en solitario si bien el juego no es social o interactivo.