El miedo es una emoción primitiva y poderosa que nos condiciona hasta límites insospechados, actúa sobre la parte emocional y menos controlada del cerebro.
La alegría forma parte de las emociones y sensaciones relacionadas con un estado de bienestar interior; felicidad, satisfacción, júbilo, éxtasis, dicha, etc.
La tristeza es una emoción que aparece ante la pérdida de una persona, un objeto u objetivo valioso.
La ira se refiere a un estado emocional caracterizado por sentimientos de enfado de intensidad variable.
El enfado es una emoción que seduce nuestro monólogo interior, que nos secuestra en pensamiento, palabra y acción.