4.
Es el proceso en el que los recursos monetarios captados o recibidos por las instituciones financieras, por parte del público en general, se distribuyen entre los agentes económicos (familias, empresas y gobiernos) que los demandan para satisfacer las necesidades de desarrollo de sus principales actividades económicas (consumo, inversión y gasto), las cuales no pueden solventar en ese momento con sus propios ingresos.