1
La táctica es fundamental, la estrategia tampoco puede ser menospreciada. Muchas partidas se pierden por emprender planes incorrectos o, sencillamente, por no saber qué hacer en determinadas posiciones.
2
Esta puede ser una de las causas más dolorosas de la derrota pues no tiene que ver con los errores cometidos sobre el tablero, sino que tiene que ver con las reglas del ajedrez o las bases del torneo.
3
La fase final de la partida es muy importante. Si no somos capaces de imponer nuestra ventaja con buena técnica, dejaremos escapar muchas victorias.
4
Es complicado mantener la calma en todo momento. Sobre todo en ciertas situaciones, como cuando te enfrentas a aun rival muy fuerte
5
El exceso de confianza nos lleva a perder el sentido del peligro. Es uno de los mayores enemigos del deportista, ya no solo del ajedrecista.
6
Los descuidos en la táctica resultan fatales en cualquier fase del juego.
7
Se exponen los siguientes puntos: nervios, desconocimiento de los finales o poca destreza en la planificación, por mencionar algunos, acaban derivando en problemas con el reloj.