Cuando nos pasa, hay que sentarse derechos y respirar por la boca. Nos tenemos que inclinar un poquito hacia adelante, así no tragamos sangre. Con dos dedos apretar despacito la nariz por la parte blanda y quedarnos así por algunos minutos. despacito la nariz por la parte blanda y quedarnos así por algunos minutos. Si no para, podemos ponernos un pedacito de gasa húmeda o de algodón tapando el orificio de la nariz, siempre teniendo cuidado de no meterlo muy profundo.