Crea tu propia rutina diaria, con distintos tipos de actividades e intenta seguir unos horarios regulares.
Intenta mantener una actitud positiva y dedicar un tiempo cada día para relajarte.
Mantente informado pero limita tu exposición a la información y selecciona bien las fuentes.
Aliméntate de forma saludable y sigue pautas de higiene del sueño.