En
la
casa
de
la
abuela
de
____________________
,
había
un
reloj
de
pared
muy
____________________
y
muy
bonito
en
el
____________________
.
En
la
parte
de
arriba
,
tenía
una
pequeña
____________________
y
cada
____________________
de
hora
salía
un
pequeño
____________________
de
madera
que
decía
:
?
Cuco
,
cuco
?
.
Después
volvía
a
entrar
muy
____________________
.
A
mí
,
me
gustaba
mucho
verlo
y
,
cuando
mis
padres
me
____________________
a
casa
de
mi
abuela
a
pasar
la
tarde
,
durante
mucho
tiempo
____________________
y
comprobaba
que
el
cuco
saliera
a
su
hora
____________________
.
Un
día
,
entonces
yo
tenía
cinco
____________________
,
estaba
esperando
sentado
en
una
silla
,
para
ver
cómo
salía
el
cuco
,
como
siempre
,
a
las
____________________
y
media
.
Lo
que
ocurrió
fue
que
el
cuco
salió
,
pero
____________________
dijo
nada
.
Entonces
decidí
____________________
otro
cuarto
de
hora
para
ver
qué
pasaba
,
y
pasó
lo
mismo
:
el
cuco
salió
,
pero
no
se
le
oyó
decir
nada
.
Yo
me
quedé
muy
____________________
pensando
qué
le
podía
pasar
.
Entonces
se
me
ocurrió
que
a
lo
mejor
le
dolía
la
____________________
.
Fui
corriendo
a
la
cocina
,
cogí
una
cucharadita
y
el
____________________
que
me
daba
siempre
la
abuela
cuando
estaba
enfermo
y
volví
al
salón
.
Cogí
una
silla
del
____________________
,
que
eran
las
más
altas
,
la
acerqué
al
reloj
y
me
subí
encima
de
ella
y
cuando
el
cuco
salió
,
le
____________________
un
cucharadita
de
jarabe
.
Al
día
siguiente
,
el
cuco
volvió
a
____________________
otra
vez
:
?
cuco
,
cuco
?
.
Cuando
le
conté
a
mi
abuela
que
yo
había
curado
al
cuco
,
la
abuela
se
echó
a
____________________
y
dijo
:
?
¡
Qué
imaginación
tiene
mi
____________________
!
?
Ahora
,
después
de
____________________
años
,
cuando
lo
recuerdo
,
a
mí
también
me
entra
la
risa
.