Suelos de turba
Suelos limosos
Suelos arcillosos
Suelos humíferos
Suelos calizos
Suelos sainos
Suelos pedregosos
Suelos arenosos
Los suelos arenosos, como son más sueltos son fáciles de trabajar pero tienen pocas reservas de nutrientes aprovechables por las plantas.
Los suelos con una alta cantidad de piedras limitan el crecimiento natural de las plantas
Son aquellos en los que se produce una acumulación de sales más solubles que el yeso, suficiente para interferir en el crecimiento de la mayoría de los cultivos y de otras plantas no especializadas.
Tienen abundante materia orgánica en descomposición, de color oscuro, retienen bien el agua y son excelentes para el cultivo.
También tiende a compactarse y deshacerse en terrones cuando se lo cultiva, pisa o trabaja cuando está húmedo.
Estos suelos tienen gran cantidad de sales calcáreas. Suelen ser de color blanco, seco y árido
Es un tipo de suelo muy compacto.
Es un material orgánico, de color pardo oscuro y rico en carbono. Está formada por una masa esponjosa y ligera en la que aún se aprecian los componentes vegetales que la originaron.