Shock séptico
Shock anafiláctico
Shock hipovolémico
Shock neurogénico
Shock cardiogénico
Reacción alérgica frente a veneno de insectos o cualquier otra sustancia
Traumatismo craneal o ingesta de tóxicos
Insuficiencia cardíaca o infarto de miocardio
Infección bacteriana
Hemorragia masiva o deshidratación extrema