Se dan cuenta de que los sucesos son motivados por ciertas causas.
Saben que las modificaciones superficiales no cambian la naturaleza de las cosas.
Son conscientes de la actividad mental y del funcionamiento de la mente
No tienen que estar en contacto sensoriomotor con un objeto, persona o evento para pensar en él.
Pueden imaginar cómo se sienten los demás.
Organizan los objetos, las personas y los eventos en categorías significativas.
Pueden contar y trabajar con cantidades.