Crear actividad
Jugar Relacionar Columnas

Evaluación/ Argumento: Razonamiento para probar o demostrar una proposición, o para convencer de lo que se afirma o se niega.

Descripción y evaluación: descripción detallada de los capítulos del libro o de los temas que aborda. Las descripciones incluyen evaluaciones positivas y negativas de cada aspecto relevante. Las evaluaciones suelen estar bien fundamentadas, y en el caso de las evaluaciones negativas es común la sutileza y la cortesía. Se utilizan citas textuales cuando resulten importantes. El reseñador puede hacer aportes propios, pero siguiendo las necesidades del libro reseñado.

Contextualización: El enfoque es muy general y se suele reponer información que puede no estar presente en el libro reseñado. ¿Cuál es el tema del libro? ¿Quién es su autor? ¿Qué aportes hace el libro a su disciplina?

Conclusión: un breve resumen de lo dicho. A su vez, se contextualiza el libro a futuro: quién lo leerá, a quién le servirá, qué cambios traerá para su disciplina, qué significará para la producción del autor. Muchas veces se incluye una evaluación general que resuma las evaluaciones positivas y negativas anteriores y, finalmente, recomiende o no recomiende su lectura.

Corchado habla de México con una nostalgia que aprieta el corazón. Una y otra vez regresa a describir San Luis de Cordero, el pueblo de Durango donde nació, y Ciudad Juárez, la ciudad de tránsito que lo acogió antes de partir a Estados Unidos. Por momentos, la manifestación de su melancolía se acerca al realismo mágico. La secuencia en la que narra como, al nacer, la familia enterró su minúsculo cordón umbilical para atarlo al terruño para siempre me recordó al García Márquez más dulce. No hay misterios en los motivos íntimos de Corchado para exponerse al peligro y convertirse en corresponsal en la tierra de sus padres: ha venido a México para resolver el acertijo de su propia identidad y entender —y quizá disolver— el vínculo amoroso que le ata a México.

Es hasta las últimas páginas cuando, con enorme sutileza y talento narrativo, Corchado invita al lector a una catarsis conmovedora. El autor está en Estados Unidos, rodeado de su familia, mirando nadar a sus sobrinos. Escucha las voces de los suyos. Respira tranquilo. Ya no se siente amenazado. Sigue pensando en México, porque no hacerlo es imposible. Pero lo ve desde lejos, desde la seguridad de la tierra adoptiva. Desde allá ha decidido querer a su país. ¿Quién podría culparlo?

Aún así, dramáticamente, Corchado trata una y otra vez de reconciliarse con la tierra mexicana. Trata de hallar motivos para convencerse de que sí, a México vale la pena quererlo tal y como está, no obstante la sangre, la traición y la medianoche. Por momentos, cuando describe sus encuentros esporádicos con lo mejor de México (los remanentes de nobleza que aún se esfuerzan por sobrevivir, a veces a pesar de sí mismos), parece que Corchado encontrará los motivos para justificar su cariño casi mítico, por México.

Alfredo Corchado, periodista nacido en México pero nacionalizado estadunidense desde la más temprana infancia, ha escrito un libro cuya intención central es responder esas preguntas dolorosas. A diferencia de otros periodistas que lo han arriesgado todo cubriendo nuestros años de sangre y miedo, Corchado no se limita a hacer la crónica del horror.