Puede que seas veloz como el viento,
Cantaban las ballenas
Pizpirigaña vino a la araña
Erase una vez
Juana la lechera caminaba muy contenta
por su sabanita para la arañita.
una pobre viejecita
con su cántaro de leche sobre la cabeza.
pero yo te ganaría en una competencia.
guiando con su canto