- (...) Escucha mi consejo: regala a cada pez una de tus brillantes escamas. Entonces, aunque ya no seas el pez más hermoso del océano, volverás a estar muy contento.
-Pregúntale al pulpo Octopus, que vive en la cueva que hay detrás del banco de coral. A lo mejor él tiene la respuesta.
-¡Pez Arcoíris, pez Arcoíris!- le llamó-. Por favor, ¿me regalas una de tus brillantes escamas? Son preciosas, ¡y como tienes tantas...!
-¡Con lo guapo que soy...! ¿por qué no le gusto a nadie?
-¡Ven pez Arcoíris, ven a jugar con nosotros!