Haz deporte de forma habitual
Utiliza platos y cubiertos limpios
Lávate las manos antes y después de comer
Bebe agua suficiente
Vigila que los alimentos estén en buen estado
Evita inhalar humos y sustancias peligrosas
Haz ejercicios que aumenten la capacidad pulmonar
Inspira el aire por la nariz
Cambiate a diario la ropa que está en contacto con la piel
Lava bien frutas y verduras
No abuses de las grasas y de la sal en las comidas
Lávate a diario