Este pensador afirma que la teología y la filosofía, aunque independientes, se complementan, ya que la segunda puede ayudar a la primera.
Su razón de origen es darles respuesta a las revelaciones sobrenaturales del cristianismo.
Toda su obra se centrará en el problema del alma y de la iluminación, así como la relación del alma con Dios.
Etimológicamente, proviene del latín “scholasticus”, que significa “el que enseña o estudia en la escuela”.
Este filósofo funda su propia capilla, la Paraclete, y poco más tarde lo nombran abad del monasterio de Saint-Gildas-de-Rhuis
En el año 1078, escribe Proslogium
Principal representante de la escuela nominalista, y negará la posibilidad de demostrar la existencia de Dios a través de la razón, ya que ésta solo es demostrable por medio de la revelación divina.
Es una de las figuras más importantes de la escolástica.
Su principal aportación a la historia del pensamiento es la creación del primer sistema filosófico del medievo.
Filosofía escolástica
Santo Tomás de Aquino
Escolástica
Guillermo de Ockham
San Buenaventura
Pedro Abelardo
Juan Duns Escoto
Juan Escoto Eriúgena
San Anselmo de Canterbury