árbol caducifolio propio del clima oceánico. Es un árbol alto –alcanza hasta 40 metros– con tronco liso, ramas de gran altura y hoja caduca. Exige mucha humedad, tolera mal el calor y muy bien el frío, por lo que es un árbol de montaña que alcanza su lugar óptimo entre los 1 000 y 1 700 metros. Prefiere los suelos calizos, aunque tolera los silíceos. Tradicionalmente su madera, dura y de buena calidad, se usaba para carboneo, celulosa o en la construcción; y su fruto, el hayuco, para alimento del ganado y extraer aceite. Actualmente, la madera se emplea para muebles, utensilios y leña. Su área principal está en la cordillera Cantábrica y el Pirineo navarro.