es la aplicación de gases plaguicidas dentro de un recinto o área. Es el método de elección cuando técnicamente no se puede emplear otro, como es el caso de la desinfección de suelos en el ámbito agrícola, el tratamiento de productos almacenados (frutos, semillas, tubérculos, etc.), tratamientos de maderas atacadas por termitas, desinfección de granjas, barcos y otros.