DESPUÉS DE UN RATO, SE ENCONTRÓ CON UNA PEQUEÑA MESA. SOBRE ELLA HABÍA UNA PEQUEÑA LLAVE, Y ALICIA DIO VUELTAS POR EL SALÓN, TRATANDO DE ABRIR LAS PUERTAS CON LA LLAVECITA.
¿NO PARECE UN MAR? PERO EN REALIDAD ES UN CHARCO DE LÁGRIMAS, QUE SE FORMÓ ENTERO CON LAS LÁGRIMAS DE ALICIA.
ELLA CRECIÓ Y CRECIÓ Y CRECIÓ, HASTA SER MÁS ALTA DE LO QUE ERA ANTES. ¡ MÁS ALTA QUE CUALQUIER NIÑO!
ALICIA QUISO VER QUÉ OCURRÍA DESPUÉS Y CORRIÓ TRAS ÉL. CORRIÓ Y CORRIÓ HASTA QUE CAYÓ DENTRO DE LA MADRIGUERA DEL CONEJO. Y EN VERDAD TUVO UNA LARGA CAÍDA. CAYÓ Y CAYÓ HASTA QUE COMENZÓ A PREGUNTARSE SI ATRAVESARÍA LA TIERRA.
¿HAN VISTO ALGUNA VEZ UN CONEJO QUE TUVIERA UN RELOJ O UN BOLSILLO EN DONDE GUARDARLO?